Kylie Rocket descubre la enorme polla de Tony Rubino
Kylie Rocket no se lo podía creer. Había probado muchas pollas grandes en su vida, pero ninguna como la anaconda gigante de Tony Rubino. Su cara de sorpresa al bajarle el pantalón fue impresionante. Comparaba ese rabo con su brazo y le parecía imposible que fuera mas largo y más ancho. Enseguida se lo llevó a la boca y comenzó a chuparlo. Quería tragárselo todo pero, por razones obvias, le era imposible. Al final se lamentó de que fuera tan grande porque solo pudo disfrutar de la punta. No había forma de que le entrara toda dentro del coño y Tony pudiera follársela sin partirla en dos.