El jefe de mi novia se la folló por el culo sin piedad
Mi novia y yo llegamos a la conclusión de que lo mejor que podía hacer era follar con su jefe. El hombre se lo pasaba provocándola y amenazándola con echarla, así que si no tenía sexo con él corría el riesgo de quedar en la calle. Nosotros no estábamos en condiciones de que ella perdiera el trabajo, así que ese día, aceptó su invitación a quedarse después de hora. Ambos creíamos que con echarle un simple polvo se quedaría tranquilo, pero nos equivocamos. El hombre la puso a cuatro patas sobre el sofá y la penetró brutalmente por el culo. Ella apretó los dientes, cerró los ojos y aguantó como pudo sus embestidas. El cabrón le reventó el culo sin piedad y me la devolvió con el ojete partido en mil pedazos.