Después de follarme a esta gorda tetona no vuelvo a follarme a una tía delgada
Me pasé meses buscando a una tía guapa y delgada para follarme en Tinder hasta que un día me puse a charlar con esta gorda tetona y me di cuenta que follar gracias a las aplicaciones de citas era mucho más fácil si bajaba mis pretensiones. La gordita me invitó a su casa y ese mismo día me la follé de frente, de espaldas y a cuatro patas. Ver sus enormes tetas botar mientras me la follaba en la postura del perrito con su culo en primer plano fue una pasada, así que desde que me la follé, no he vuelto a buscar tías delgadas nunca más.