Mis amigos me hicieron pagar la apuesta follándome la boca
Mis amigos no me tuvieron ni un poco de piedad. Es cierto que cumplieron con su promesa de no follarme, pero en cuanto perdí la apuesta me ordenaron que me quitara la ropa y cuando me quedé completamente desnuda, empezaron a darme hostias mientras se turnaban para taladrarme la boca. Me hicieron garganta profunda una y otra vez mientras me tenían inmovilizada cogiéndome de los brazos, me pusieron a cuatro patas, uno de ellos me metió dos dedos en el culo y al final me abrieron las piernas por la fuerza para darme nalgadas y pegarme en el chocho mientras me lo veían en primer plano. ¡Fue la experiencia más humillante de mi vida!