Tres pollas negras para mi novia infiel e insaciable
Cuando empecé a salir con mi novia, ella me advirtió que no pensaba perder su libertad. Su intención era la de seguir follándose a todos los hombres que le gustaban y probar todas las cosas que le llamaban la atención. Soñaba con cumplir todas sus fantasías, y yo acepté confiando en que tarde o temprano, dejaría de hacerlo. Por el contrario, su morbo cada día crecía más y más, hasta que un día me confesó que quería que la viera follando con tres negros que acababa de conocer. Yo no me animé a hacerlo personalmente, pero sí a través de la webcam. Así fue como los negros le hicieron un gangbang mientras se reían de mí, que como un pobre y triste cornudo, me masturbaba viendo como se la follaban.