Mi hermana me enseñó el coño peludo y me la follé
Pensé que me lo había imaginado cuando noté que mi hermana no llevaba bragas puestas. ¿Qué hacía la zorra en mi cuarto, con una camisa bien corta y sin ropa interior? ¿Acaso quería que le viera el chocho? Ese día descubrí que la guarra llevaba el coño peludo, pero perfectamente arreglado. Le pedí que me lo enseñara bien y la muy zorra se levantó la camisa bien hasta arriba, dejando el chocho totalmente expuesto. Inmediatamente saqué mi polla dura y comencé a masturbarme. Ella, sin decir una palabra, se arrodilló sobre la cama y se puso a hacerme una mamada. ¡A los pocos minutos estaba follándome a mi propia hermana!