Codi Vore se folla al repartidor Van Wyldes con su marido ciego en casa
El repartidor no se lo podía creer. Mientras estaba entregándole la caja al cliente, su rubia esposa apareció para firmarle el recibo y, provocadora como ninguna, le enseñó las tetas. Para el chaval, Van Wyldes, era una situación completamente extraña, pero para Codi Vore era una mas de las pervertidas aventuras que suele montar con el cornudo del esposo. Esta vez, el marido se hizo pasar por ciego, para que la rubia sedujera y se follara al repartidor en sus morros. Al hombre le encanta ver a su mujer mamando otras pollas, pero mucho más gozando como una perra en celo mientras se la están follando.