Ricky Spanish recibe un sesión de disciplina de la madrastra Rachael Cavalli
Lo último que desea esperarse un padre es que la policía pegue en la puerta con el hijo del brazo. Eso le pasó a Rachael Cavalli con Ricky Spanish, el cabrón del hijastro. Por pillarlo de mirón en una tienda espiando a las tías en los probadores, lo detuvieron y lo llevaron a la casa para entregárselo a los padres. La madrastra, como el padre no estaba, fue la encargada de castigarlo y le propinó una cruel sesión de disciplina. En realidad solo hubiese sido cruel para un gay, ya que salvo por las pocas nalgadas que le dio, el resto del castigo le encantó. ¿A quién no le gustaría follarse a Rachael Cavalli, que le chupe la polla y le obligue a comerle el coño?