Comprobé que era muy puta cuando me la follé por el culo
Evidentemente estaba equivocado, pero a simple viste hubiera apostado a que esta morena era una mojigata. Su rostro de ninguna manera me hacía intuir que era tan puta como decía ser, así que no le creía una palabra. Tuve que comprobarlo directamente, y la verdad es que me quedé sorprendido. Primero cuando se puso a chuparme la polla. Era obvio que no era ninguna novata. Sabía metérsela y sacársela de la boca a la perfección, comiéndosela entera, sin quitarme la mirada de los ojos. Eso me volvió loco, pero cuando se puso a cuatro patas ofreciéndome el culo para que se lo penetrara, directamente enloquecí. ¡Qué rico fue comprobar que era una zorra taladrándole el ojete sin piedad!