El cuñado de Samantha Flair la pilla masturbándose y le pide sexo
La amenaza del cuñado de Samantha Flair era bastante inconsistente. Si bien la había pillado masturbándose ¿Qué podría decirle al novio? ¿De qué la acusaría? ¿Acaso era pecado masturbarse? Sin embargo, la guarrilla prefería que no se lo contara, así que decidió sentarse a negociar. Lo único que le exigía era que se encuerara y le hiciera una mamada, así que Samantha aceptó chuparle la polla y dejar que se masturbara mirándole las tetas y el coño hasta correrse sobre su barriga. Ahora que ya se han visto desnudos, se han quedado con las ganas de follar. Samantha se muere por probar su polla y espera ansiosamente que vuelva a encontrar una excusa para chantajearla.