Follando con una zorra indonesia adicta a la leche
En lo zorras, no hay nadie que le gane a las indonesias. Estas tías son bien guarras y se vuelven locas cuando les meten la polla. Enseguida comienzan a moverse como gatas en celo y no paran de gritar y gemir pidiendo más y más. Yo me he follado a unas cuantas y la verdad es que siempre me lo he pasado teta. Esta tía, sin embargo, superó todas mis expectativas. Era tan puta que varias veces, mientras me la estaba follando, me pidió que parara porque quería chupármela. Era evidente que necesitaba que se la follaran con dos pollas juntas, una por la boca y otra por el coño, y que le hicieran tragar todas la leche.