Follarme a la amiga de mi madre fue mas fácil de lo esperado
Toda mi vida tuve la ilusión de follarme a la amiga de mi madre. Ella es una rubia tetona que me conoce desde que nací, pero a pesar de eso se ha conservado muy bien con el paso del tiempo. Claro que esas fantasías siempre quedaban en unas buenas pajas, ya que creía que nunca tendría la oportunidad. Esa tarde, la rubia vino a casa mientras yo estaba solo y me pidió permiso para tomar un baño. ¡No había una oportunidad mejor que esa! Mientras se estaba duchando, me metí en el baño y, aunque al principio se sintió avergonzada de que la viera desnuda, enseguida se puso cachonda, me dejó meterle mano y acabamos yendo a mi cuarto para follármela y que me chupara bien la polla.