La asiática se puso cachonda con los masajes y acabó mamando polla
La asiática nunca había ido a un masajista como este. Era su primera vez estando completamente desnuda, embadurnada de aceite de la cabeza hasta los pies, siendo manoseada por un tío que no sentía el más mínimo pudor a la hora de tocarle el culo y las tetas. Lo peor fue cuando le metió los dedos en el coño. Así logró ponerla al cien para qué, al voltearla y pasar cerca de su rostro, la zorra cogiera su polla y se pusiera a mamársela. La japonesa ya estaba entregada y lista para todo. ¿Cómo no iba a follársela el masajista si la guarra casi que se lo estaba pidiendo a gritos?