Madura alemana cachonda se folla al marido de su propia hija
Esa tarde, la madura alemana y el marido de la hija empezaron a confesarse cosas que les sucedían en sus respectivas relaciones. Él tenía la necesidad de hablar con la suegra de su falta de sexo. Quería que ella le hiciera entender a la hija que si no lo complacía en la cama, acabarían divorciándose. Eso le dio pie a la madura para confesarle que hacía muchos años que nadie se la follaba. La solución para el problema de ambos estaba a la vista. Después de pactar que nunca jamás le contarían una palabra a nadie de lo que sucediera ese día, el yerno sacó la polla y se la ofreció a la suegra. La zorra se puso a mamársela mientras se quitaba la ropa y terminaron echándose un polvo. Esa fue la única follada entre los dos hasta el momento, pero cada vez que se ven, las indirectas van y vienen. Es evidente que pronto acabarán follando de nuevo.