Para follársela en la casa tiene que follarse a la gorda de la hermana
Menudo problema tiene este negro para follarse a la vecina. Como él es casado, no puede hacerlo en su casa, así que no le queda más remedio que hacerlo en la casa de ella. El asunto es que allí vive con el marido y la hermana, así que para que el marido no se entere, tiene que hacerle también el favor a la hermana. La tía es una gorda bastante fea que, con el cabello corto, hasta parece un hombre. Sin embargo, sus ganas de follarse a la vecina son tantas que no tiene problema en acabar montando tríos con la gorda de la hermana.