Todavía no me creo que me follé a mi madrastra
Me cuesta mucho creerme que me follé a mi madrastra. Todavía no caigo en la cuenta de lo que hice. Desde entonces no puedo mirar a mi padre a los ojos, ni me animo a ir a su casa cuando ella está. Sucedió todo de repente, y la mayor parte de la culpa la tuvo ella, quien fue la que empezó a provocarme poniéndome las manos encima. Para colmo, cuando empecé a chuparle las tetas no hizo nada para detenerme. Después me dio una clase magistral de sexo oral, demostrándome que es toda una experta mamando pollas. ¿Cómo no iba a follármela? Se tenía merecido un buen polvo después de haberme chupado la polla de semejante manera.