Un par de copas y ya estaba lista para hacer un trío

Mi vecina es de las tías más putas que he conocido jamás. Un sábado a la noche yo estaba en casa con un amigo y empezamos a escuchar música fuerte que venía de su piso. Entonces nos asomamos por la ventana y vimos que estaba sola, bailando completamente borracha. Por supuesto, pegamos en su puerta y nos invitó a entrar para montar una fiesta entre los tres. Rápidamente, la fiesta se convirtió en un trío ya que la zorra estaba desesperada por comerse unas buenas pollas y enseguida se puso a chupárnoslas mientras le quitábamos la ropa para follarla entre los dos.